Hasta ahora, el material de carbono más resistente, capaz de soportar grandes presiones, era el diamante. Esta dureza, junto con su conductividad térmica, ha hecho del diamante un material muy utilizado en la industria desde los años 50. Actualmente, un 90% aproximádamente de las lijas industriales están hechas de diamante de origen sintético. Normalmente, el diamante en la industria se utiliza para perforar, lijar, pulir y cortar.
Volviendo a la noticia, la Universidad de Standford y el Laboratorio Geofísico del Instituto Carnegie, en Estados Unidos, acaban de descubrir una nueva forma de carbono capaz de soportar presiones extremas, algo que solamente se había visto hasta ahora en el diamante. Dicho experiemento comenzó a partir del llamado carbono vítreo, una forma de carbono creada en 1950 de manera artificial y que combina propiedades presentes en el grafito, en los vidrios y las cerámicas. Este equipo de científicos compactó en el laboratorio el carbono vítreo 400.000 veces la presión atmosférica. Además, fue capaz de soportar más de un millón de veces la presión atmosférica en una dirección, una presión increíblemente alta. Estos hechos combiertes a esta nueva forma de carbono en un material muy fuerte, sólo comparable con el diamante, y, por tanto, de características similares. Pero, a diferencia de éste último, cuya estructura atómica es ordenada y cristalina, la nueva forma de carbono vítreo es amorfo, es decir, no tiene una estructura ordenada de cristales.
Desde hace unos años se conoce también el grafeno, otra forma de carbono con unas propiedades increíbles, como una altísima conductividad térmica y eléctrica, gran elasticidad y dureza y una impresinante resistencia, unas 200 veces la del acero. El potencial de este nuevo material es muy alto, algo que no han dejado pasar por alto los científicos que investigan actualmente el grafeno.
Ya iremos viendo las utilidades de esta nueva forma de carbono, ya que seguramente sea muy útil en la industria y quizás más barato de fabricar. La verdad es que día a día, la ciencia no deja de sorprendernos.

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