Escapadas de un día baratas
En nuestros viajes de cualquier época del año, cuando disfrutamos de nuestras vacaciones y escapadas, se nos da siempre el caso de que tenemos que pagar un servicio de hotel durante 24 horas cuando en realidad solo nos hemos limitado a dormir y desayunar en sus instalaciones. El resto del tiempo lo hemos dedicado a recorrer lo más interesante del destino elegido, a disfrutar de una buena comida y una cálida cena en algún restaurante local y a ocupar nuestras horas de ocio en otros menesteres turísticos hasta la hora de volver al hotel y descansar hasta la mañana siguiente. Otras veces, la espera de un vuelo en conexión que hará que debamos viajar temprano al día siguiente o la asistencia a cualquier espectáculo fuera de nuestra ciudad que nos obligue a pasar la noche fuera nos obliga a pagar la estancia de un hotel de un día completo cuando solo lo hemos utilizado unas horas
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